Un grupo de biólogos, que realiza el seguimiento de líneas eléctricas en Fuerteventura, ha localizado este lunes un ejemplar de guirre muerto sobre un tendido de REE en la zona de la Rosa de la Monja, en Puerto del Rosario.

Tras descubrir el cadáver del animal, los biólogos llamaron a los agentes de Medio Ambiente del Cabildo de Fuerteventura quienes, tras personarse en el lugar, pudieron comprobar que se trataba de una hembra perteneciente a la pareja de guirres que anida en la zona de Guisguey.

La consejera de Medio Ambiente del Cabildo majorero, Natalia Évora, ha señalado a Efe que a primera hora de esta tarde se bajará al animal del tendido para, posteriormente, realizarle una radiografía con la que se podría conocer la posible causa de la muerte.

Según Évora, los motivos de la muerte pueden deberse a "una electrocución, colisión o enganche del animal en el tendido", aunque no se descartan otras causas.

Además, se aplicará el protocolo "Antídoto", un programa que lucha contra el envenenamiento de la fauna silvestre, por lo que el cadáver del animal se trasladará en los próximos días a la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria para realizarle algunas pruebas y descartar si padecía algún tipo de patología o envenenamiento.

La responsable insular de Medio Ambiente ha instado a REE a tomar medidas con los tendidos eléctricos que vayan a modificar o instalar en la isla para "evitar este tipo de accidentes".

El guirre es una variedad de alimoche en peligro de extinción del que solo se conservan ejemplares en Fuerteventura y, en menor medida, en Lanzarote, existiendo entre unos 250 y 300 ejemplares en toda Canarias.