Talleres Palermo custodia un trocito de los cines Monopol

Talleres Palermo, la antigua carpintería reconvertida en espacio cultural en el corazón de Guanarteme, custodia desde ayer un pedazo de los antiguos cines Monopol tras la compra de tres butacas de esta mítica sala capitalina, que echó el cierre el pasado 2020.

«Nos hemos traído un trocito de historia de los Cines Monopol a la vieja carpintería. Cuánto lo echamos de menos y qué huérfanos del ‘otro’ cine en pantalla grande nos quedamos muchos en esta ciudad», expresa el responsable de Talleres Palermo, Ángel Fernández, en un post a través de sus redes sociales. «Si eres de esos, al menos te podrás tomar una birra en estas butacas», añade.

Con la adquisición de estas tres butacas rojas, que ahora forman parte del mobiliario de Palermo, la sala también busca volver al «espíritu original del espacio» basado en la recuperación de piezas antiguas a través de la firma Polonium 209.

El vacío que dejaron los Monopol

Los cines Monopol, regentados por la familia Melo y ubicados en el interior del centro comercial homónimo en la Plaza de las Ranas, en el centro de Las Palmas de Gran Canaria, bajó el telón para siempre en octubre de 2020 como consecuencia de la pandemia. Aunque resistió los embates unos meses después del confinamiento, las pérdidas económicas, unidas, a problemas con la licencia del local y con el Ayuntamiento capitalino, abocaron al Monopol a su clausura definitiva, lo que, como bien apunta Ángel, cerró la última ventana de la ciudad a estrenos semanales del mejor cine de autor, al séptimo arte de otras latitudes y códigos cinematográficos, así como a ciclos especiales o temáticos, con opción de versión original subtitulada y precios asequibles. Gracias, Talleres Palermo, por salvar este trozo de nuestra historia cultural.