El aviso de Gonzalo Bernardos sobre la subida de las pensiones en 2024: “Es nula”

El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha hecho público el dato provisional del Índice de Precios al Consumidor (IPC) relativo al 2023 que se sitúa en un incremento del 3,8%. Tras la última reforma de las pensiones, la cuantía queda ligada al IPC anual, por lo que a falta de confirmación oficial, en 2024 se producirá una subida de las pensiones del 3,8%.

El dato oficial se publicará por el INE a partir del 14 de diciembre, aunque muchos pensionistas celebran la decisión después de que en los últimos años hayan aumentado los precios, sobre todo, en los supermercados y en las gasolineras. Cabe recordar que el año pasado, ya se produjo un aumento del 8,5% para las pensiones contributivas y de un 15% para las no contributivas.

El economista Gonzalo Bernardos ha publicado un mensaje en sus redes sociales valorando la subida de las pensiones que se producirán en 2024 y su opinión es rotunda. Bernardos explica que lo importante no es el incremento en la cuantía, sino que pueden comprar con este incremento. “En 2023, la ganancia de poder adquisitivo fue nula y también lo será en 2024. No obstante, muchos estuvieron contentos con la del año pasado. Es el efecto espejismo”, detalla el economista.

La subida de las pensiones, un problema para los jóvenes

Por otra parte, Bernardos también ha querido analizar el incremento de las pensiones y su papel en cómo puede afectar al futuro de los más jóvenes. En España, actualmente los más jóvenes son los que más problemas tienen para incorporarse al mundo laboral, con sueldos bajos y la incapacidad para poder independizarse. 

“En los dos últimos años, los jubilados han sido unos privilegiados, pues casi todos los trabajadores han perdido durante ellos su poder adquisitivo, pues sus salarios subieron menos que la inflación”, afirma.

Además, en su paso por el programa La Sexta Xplica, Gonzalo Bernardos afirmó que según el modelo actual de la Seguridad Social en España, si los pensionistas cobran más, los trabajadores ganan menos porque deben pagar más a la Seguridad Social. “Si el país produce una vaca, y no tres o cuatro, ¿cómo se reparte? Por ahora el solomillo se lo quedan los jubilados y los jóvenes alguna costilla”, declara el economista.