Así se comporta el tiburón angelote en la Reserva Marina de La Graciosa

Investigadores del proyecto Angel Shark Project han instalado marcas acústicas en 84 ejemplares adultos para estudiar sus desplazamientos y genética | La iniciativa, pionera en el mundo, avanza en sus primeros datos que los machos se mueven más que las hembras

Marcaje acústico de angelotes en la Reserva Marina de La Graciosa y los Islotes del Norte de Lanzarote

Angel Shark Project: Canary Islands

¿Qué zonas prefieren los angelotes en la Reserva Marina de La Graciosa y los Islotes del Norte de Lanzarote? ¿En qué época del año se acercan más a costa? ¿Hay alguna diferencia entre los movimientos de los machos y las hembras ? ¿Se mueven en una isla o se desplazan a otras? Son solo algunas de las preguntas cuyas respuestas se extraerán del análisis de los datos de los nueve receptores acústicos instalados en la citada reserva marina, la mayor en extensión de Europa, dentro de la iniciativa que lleva a cabo Angel Shark Project: Canary Islands, un proyecto en el que colaboran la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), el Museo Zoológico Alexander Koenig (ZFMK) y la Sociedad Zoológica de Londres (ZSL).

El objetivo del programa de marcaje acústico de los angelotes, una acción que se lleva a cabo por primera vez en el mundo, es identificar patrones de residencia y de desplazamiento de ese tiburón en una isla o entre varias del Archipiélago, además de estudiar su genética.

La familia de los tiburones ángel es la segunda familia de tiburones y rayas más amenazada del mundo y debido a su ubicación costera y biología (animales grandes, maduración tardía y con bajas tasas de reproducción), es “muy susceptible al impacto de la pesca y la degradación de su hábitat”, señalan desde el proyecto.

El Archipiélago es el último bastión de una de las especies de ese tiburón, el angelote (Squatina squatina). En las Islas se encuentran frecuentemente y son avistados de forma habitual por buceadores y pescadores. En 2019 el tiburón ángel fue incluido en la Lista de Especies Amenazadas de España en aguas de Canarias dentro de la categoría en peligro de extinción, es decir, bajo la máxima protección.

De ahí que esté estrictamente prohibida bajo ley cualquier actuación realizada “con el propósito de matar, capturar o molestar a un angelote, así como la destrucción o deterioro de su hábitat y las áreas de reproducción de tiburón, o procesar, vender, transportar, comercializar o intercambiar tiburones ángel vivos o muertos”, avisan desde Angel Shark Project: Canary Islands.

Los detalles

Entre julio de 2018 y abril de 2021 se han marcado 84 angelotes adultos (61 hembras y 23 machos) con marcas acústicas y se han contabilizado 108.689 detecciones de estos angelotes en los nueve receptores acústicos que hay sumergidos en la reserva marina entre profundidades de 15 a 110 metros , detalla Michael Sealey, uno de los coordinadores del proyecto de marcaje acústico de los angelotes en la reserva marina.

El estudio ya ha arrojado los primeros datos. Los angelotes prefieren las aguas someras de la Reserva Marina de La Graciosa entre los meses de noviembre y enero. Además, “los machos presentan una mayor movilidad, mientras que las hembras son más sedentarias en el periodo que permanecen cerca de costa”, avanza Sealey.

David Jiménez, doctor en Ciencias del Mar y uno de los responsables de este proyecto, explica que los receptores detectan la presencia de los angelotes cuando estos pasan a menos de 200 metros. Cada cierto tiempo los científicos acuden a la reserva marina para cambiar las pilas de esos dispositivos, realizar un mantenimiento de los mismos y descargar los datos del último año, como ocurrió en la campaña realizada el pasado mes de abril.

Los ejemplares prefieren las aguas someras de la reserva marina entre noviembre y enero

A cada angelote adulto marcado se le ha instalado un pequeño dispositivo en la aleta dorsal (marca acústica) y cada vez que el ejemplar pasa cerca de uno de los receptores, este detecta la señal de la marca que tiene el animal y graba los datos, como cuántas veces ha pasado el tiburón por allí o cuánto tiempo ha permanecido en esa zona, entre otras particularidades.

El año pasado, por ejemplo, se constató que un angelote marcado en Lanzarote con una marca visual, se desplazó a Fuerteventura, lo que, según Jiménez, “significa un gran paso que demuestra que los angelotes se mueven entre las dos islas, lo que hasta ahora se desconocía”. Añadió que “algunos vuelven todos los años, otros se van y no regresan y unos parecen ser más activos que otros”.

Hasta ahora se desconocía que los angelotes se mueven entre las islas

La novedosa metodología que emplean los investigadores del proyecto, consiste en la colocación de dispositivos acústicos en tiburones adultos debajo el agua, por lo que el procedimiento causa un estrés mínimo a los animales.

La información que se obtenga del procesamiento de los datos será muy valiosa para diseñar medidas de protección y conservación eficaces para el angelote.

Más información sobre el proyecto en la página web www.angelsharkproject.com