Cazan en un vuelo que se dirigía a Fuerteventura a una mula con 216 gramos de coca

Los agentes de la Guardia Civil localizan a la acusada, que llevaba el paquete en el interior del cuerpo, en el aeropuerto de Fuerteventura

El paquete de cocaína que la mujer ocultaba en su cuerpo.

El paquete de cocaína que la mujer ocultaba en su cuerpo. / LP/DLP

La Provincia

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La Guardia Civil de Fuerteventura ha detenido a una mujer de 38 años como presunta autora de un delito contra la salud pública, al ser detectada en la sala de llegadas del aeropuerto de Fuerteventura con cocaína oculta en el interior de su organismo. Llevaba en un solo paquete 216 gramos de la sustancia.

Los hechos ocurrieron el 20 de junio cuando la Guardia Civil de la Sección Fiscal y de Fronteras, en el marco de funciones de Resguardo Fiscal del Estado y las actuaciones encaminadas a evitar y perseguir el contrabando, procedió a fiscalizar un vuelo procedente de Barcelona.

Ante la actitud nerviosa y evasiva de una de las pasajeras se decidió identificarla con el objetivo de realizarle una entrevista. Debido a las respuestas incongruentes que dio a los agentes y al fuerte estado de nerviosismo, se le invitó a realizarse una exploración radiológica. La mujer no se negó, informan desde la Guardia Civil.

Finalmente, fue traslada al Hospital General de Fuerteventura, donde tras una primera exploración los médicos observaron un objeto extraño en el interior de su organismo. La mujer reconoció que llevaba un único envoltorio con sustancias que contenía 216,7 gramos de cocaína. Era una mula de la droga.

Tras expulsar la mercancía, fue detenida acusada de un presunto delito contra la salud pública. La mujer, junto a las diligencias, fueron puestas a disposición judicial del juzgado de guardia de Puerto del Rosario.

En otra operación de la Guardia Civil, esta vez en Tenerife, los agentes han desmantelado varios puntos de venta de drogas ocultos bajo la falsa apariencia de una asociación de fumadores.

Los agentes detectaron un aumento de apertura de clubes cannábicos en el sur de Tenerife e iniciaron una investigación en la que descubrieron que, realmente, eran sitios para vender marihuana y hachís.

Se realizaron cuatro entradas y registros en clubes, dos en el municipio de Adeje y dos en Arona, interviniéndose en su conjunto 45 kilogramos de marihuana, tres kilogramos de hachís y 7.000 euros.

En el almacén anexo de uno de los locales, los agentes localizaron un laboratorio de cultivo y elaboración de marihuana perfectamente estructurado, encontrando las plantas en estado medio de crecimiento, así como otro habitáculo de almacenamiento de la droga.